Debido a que estás en este sitio web voy a asumir que en algún momento has leído historias inspiradoras de algunas de las personas más exitosas del mundo.

Pudiste estar sorprendido al saber que estos empresarios, fracasaron en la escuela.

Grandes nombres como Sir Richard Branson, Bill Gates, Steve Jobs, Michael Dell, Benjamin Franklin y Thomas Edison (la lista continúa) forman parte del club. 

Esta tendencia se hizo atractivo en los últimos años; que al graduarte de la escuela y de la universidad se ha convertido en lo normal, las historias de los empresarios que no se conforman han provocado una actitud de no conformarte en los jóvenes empresarios.

A través de mi propia experiencia e investigando personas exitosas que han abandonado la escuela, he reunido las cuatro razones principales por que la escuela no es para los empresarios:

1. Toda teoría, ninguna acción

Por supuesto, las escuelas han mejorado en esto. Pero en mayor parte, el poco aprendizaje practicado que se proporciona todavía se hace en un ambiente fuertemente controlado. Alan Sugar dijo una vez que “no se puede aprender el negocio de un libro. Lo más importante es la experiencia acumulada.” En cuanto más acción tomes, más sabio te convertirás y más oportunidades tendrás para ti. Un entorno de aprendizaje controlado simplemente no apoya eso.

La educación se basa principalmente en la teoría. Por definición, se aprende los “principios sobre los que se basa la práctica de una actividad.” El método de enseñanza es aprender durante años y años, entonces cuando finalmente llegas a la edad adulta, es cuando implementan. En ese momento, debido al desinterés y el hecho de que probablemente no estudiabas para cada examen, habrías olvidado casi todo lo que aprendiste.

“Un joven es una teoría, un viejo es un hecho.” – E. W. Howe

La manera apropiada es poner la teoría en práctica es así como aprendes. ¡No aprenderías el piano ni la guitarra sin tocarlo! Es simple prueba y error, revisar y repetir. Eso es lo que la gente que tiene éxito hace; Intentan algo y si fallan aprenden. Es probablemente por qué Steve Jobs “fracaso” en la escuela primaria.

En sus palabras, ‘la escuela tuvo la culpa de tratar de hacerme memorizar cosas estúpidas en lugar de estimularme.’ Cuando tienes el deseo de crear algo o hacer una diferencia, no hay tiempo para debatir, analizar y reflexionar.

 

2. Fracasar se basa en los resultados de las pruebas

Durante nuestro tiempo en la escuela y la universidad, nuestro éxito se basa en los resultados de las pruebas. Debido a esto, el nivel y la calidad de tus calificaciones pueden tener un enorme impacto en tu carrera, si eliges la ruta del empleado.

La mezcla de los resultados de las pruebas y de las calificaciones posteriores es una receta para dudar de ti mismo y no estar satisfecho. Las personas independientes y los que están motivados se niegan a tener miedo de ir en un camino que no son están apasionados sólo porque es la opción ‘realista.’

En cambio, ven el fracaso como una cosa positiva, una herramienta para aprender y analizar para mejorar sus métodos. Si a Thomas Edison se le dio la tarea de crear la bombilla como un proyecto de la escuela en lugar por su propia iniciativa, ¿habría intentado tantas veces, o incluso se le hubiera permitido seguir intentando después de tantos fracasos?

El dicho “no juzgues a un pez por su capacidad de treparse a un árbol” se me viene a la mente. La escuela determina el éxito de los estudiantes en un rango estrecho de habilidades, pero las personas exitosas se juzgan a sí mismas en su capacidad de perseverar en hacer lo que aman, no lo que se les dice que hagan.

3. La escuela crea seguidores, no líderes

La escuela debe ser una plataforma para que los estudiantes descubran y aprendan acerca de sus pasiones con el fin de crear individuos de alto rendimiento y en líderes. Actualmente es una plataforma para crear seguidores (en otras palabras, empleados).

De hecho, cuando visité varias escuelas de negocios, sus puntos de venta eran el porcentaje de estudiantes que estaban empleados después de graduarse. Imagínate que, un curso de emprendimiento es diseñado para poner a los estudiantes en un empleo?

Las personas exitosas se desarrollan a una edad temprana en estudiantes independientes porque la escuela no puede estimular su curiosidad. Thomas Edison fue visto como hiperactivo y propenso a la distracción en la escuela, considerado como “difícil.” Continuó a ser educado en casa y muy rápido desarrolló un “apetito por el conocimiento … un proceso de auto-educación y aprendizaje independiente.”

“Los líderes pasan el 5% de su tiempo en el problema y el 95% de su tiempo en la solución. Supèralo y domina! ” -Tony Robbins

Los líderes buscan el conocimiento para alimentar su ambición. Ellos no presagian el bienestar siendo alimentados con información selectiva. 

Los seguidores son personas que aceptan lo que les dicen y hacen lo que se les dice que hagan. Líderes, como Steve Jobs, desarrollan sus propias opiniones y las usan para influenciar a otros.

 

4. No tienen algo que probar

Las personas exitosas nunca actúan por lo que se espera de ellos. Actúan en lo que creen y en lo que están apasionados. Las escalas sociales y las expectativas de la escuela pueden forzar a un estudiante a convertirse en alguien que no son. Las personas exitosas saben exactamente quiénes son y lo qué quieren.

La presión para someterte a las normas sociales es probable que se forman mediocres porque los estudiantes tienden a someterse a las reglas de la escuela y a sus compañeros a pesar de sus creencias, para ser aceptado. Esto les impide liberar todo su potencial.

En una carta a su padre, escribió “cualquier cosa que haga en la vida lo quiero hacer bien y no a medias.” Él persiguió por lo que estaba apasionado a pesar de lo que se esperaba de él. Ese tipo de comportamiento es cómo los individuos desafían lo que es aceptado y cambian el mundo.

Como empresario, ¿te ayudó la escuela a enseñarte algo que usas hoy? Deja tus pensamientos en la sección de los comentarios!